Nicolás Veracierta: Casas rurales para disfrutar del agua

Imagina despertarte, levantarte a abrir la ventana y perder la vista en las aguas de un bello lago. O irte a dormir arrullado por el murmullo de las aguas de un río. La cercanía del agua en todas sus formas es uno de los alicientes que te  ofrecen algunas de nuestras casas rurales. Ve a mojarte (o casi) en alojamientos tan fantásticos y acuáticos como estos:

1. Aguas pirenaicas. En pleno Pirineo navarro puedes ir a descansar al Hostal Quinto Real, en Eugi (Navarra). Las vistas al embalse son un atractivo añadido a este precioso pueblo montañés junto al Camino de Santiago. El hostal, que dispone de cafetería y restaurante, tiene capacidad para 40 personas.

2. El río que desaparece o no. Pegadito a una de las lagunas de Ruidera, el Hotel Albamanjón (Ossa de Montiel, Albacete) tiene toda la paz que busques. Está al borde de la laguna de San Pedro, y algunas de sus habitaciones tiene magníficas vistas y hasta terraza para que disfrutes de las aguas día y noche.

3. Edén montañés. La Casa de Campoo (Campoo de Yuso, Cantabria) es una tradicional casa montañesa junto al embalse del Ebro. Una casa de madera y piedra totalmente restaurada que invita a la tranquilidad a sus hasta 20 huéspedes. Perfecta para familias con niños y grupos grandes que agradecerán su amplitud.

4. Dormir escuchando el río. Las aguas del río Umia arrullarán tu sueño en O Palomar y A Casa do Avó, en A Estrada (Pontevedra). Rodeadas de montañas y vastos prados, ambas casas se encuentran en una preciosa comarca del interior de la Galicia Atlántica.

5. Vistas e incluso golf. El embalse de Valdecañas da nombre y vistas esta Finca en Peraleda de la Mata (Cáceres). Desde ella puedes divisar también la Sierra de Gredos en un entorno natural espectacular. Dos casas con un total de seis habitaciones dobles muy cerca de la Isla de Valdecañas, donde puedes  practicar golf y todo tipo de deportes náuticos.

6. Sobre las aguas. No existe manera mejor de disfrutar de las aguas del Río Duratón que alojarse sobre ellas. El río pasa a los pies del Hotel Molino Grande del Duratón (San Miguel de Bernuy, Segovia), al comienzo de las famosas Hoces. El mirador al río y la piscina climatizada harán todavía más acuática tu estancia.

7. Una casa en la orilla. El pantano de Zufre se extiende majestuoso junto a la Finca La Vicaría, en Zufre (Huelva). Aquí puedes escoger entre las ocho casas que componen este alojamiento rural con un microclima único y situada en el corazón de la Sierra de Aracena y Picos de Aroche.

8. Entre campos de arroz. En la comarca del Delta del Ebro no te faltará agua ni dulce ni salada para disfrutar. A solo dos kilómetros de la playa, puedes alojarte en Paradise Ebro (Deltebre, Terragona), situada entre campos de arrozales y en el corazón del parque natural.

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